Falta de socialización de leyes, casos de corrupción, la tarea inconclusa de la reforma de la justicia y la eterna crisis con los cocaleros son cuatro de cinco debilidades que algunos sectores sociales identifican en el gabinete de Luis Arce. Desde la COB y el MAS La Paz, llaman a una purga de pititas y que se cumpla el Estatuto Orgánico de ese partido.
El secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), Ebert Rojas, cree que el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales, “debe ser cambiado”.
“Hay ministros que le han hecho pecar a nuestro Presidente por no socializar las leyes”, complementó el ejecutivo. El 14 de octubre, la ministra de Presidencia, María Nela Prada, anunció el retiro del proyecto de Ley 218 de Ganancias Ilícitas y admitió que “faltó socializar” la norma.
La segunda debilidad está referida a la reforma judicial. “Algunos ministros se han aplazado, como el Ministro de Justicia (Iván Lima)… que tenía que trabajar (reforma de justicia) y no lo hizo. No sé si tendrá miedo o le faltarán huevos (sic)”, indicó Álvaro Chuquimia, dirigente de juventudes masistas. Rojas indica que Lima debe ser cambiado.
Una tercera asignatura pendiente es el conflicto entre el Gobierno y la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) de La Paz. En este caso, Chuquimia considera que el titular de Gobierno, Eduardo del Castillo debe ser sustituido, por su falta de gestión.
“El Ministro de Gobierno tiene que ser cambiado, porque hace quedar mal a nuestro Presidente (Arce). Sin saber los estatutos orgánicos de Adepcoca, mete mano en las tres provincias y genera odio”, precisó Chuquimia. El 5 de octubre, los cocaleros tradicionales recuperaron su sede de Villa Fátima en poder de cocaleros afines al Gobierno. La oposición vio en ello una derrota del oficialismo.
Corrupción
La cuarta debilidad es la corrupción. En julio, el ministro de Educación, Adrián Quelca, fue vinculado a un caso de tráfico de exámenes. Unos días después la viceministra de Educación Aurea Balderrama acusó al ministro por tráfico de influencias. El caso todavía se ventila en la justicia.
Ayer, Página Siete preguntó al ejecutivo de la Csutcb, Ebert Rojas, si Quelca debería ser cambiado y el dirigente respondió: “Mañana (hoy) aclararemos esos temas”. El Pacto de Unidad, que forman sectores sociales del MAS, dará hoy una conferencia de prensa para referirse a eventuales cambios en el Gabinete.
La quinta debilidad que expuso al Gobierno ante la oposición se refiere a la mala gestión en el caso de la XI Marcha Indígena por parte del ministro de Medio Ambiente y Agua, Juan Santos. Ayer, los marchistas que reclaman por sus territorios cumplieron 27 días sin ser oídos por el Gobierno en Santa Cruz.
El conflicto se centró en la urbe cruceña, pero la columna anunció que denunciarán a Bolivia ante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP26, que empezará la próxima semana en Escocia. Sectores sociales del MAS hicieron conocer al Ejecutivo su molestia por la gestión de Santos.
Cumplir estatuto
Eddy Loza, jefe departamental del MAS en La Paz, reclamó mayor participación del pueblo en las instituciones y que se cumpla el Estatuto Orgánico de ese partido, que dice: para ser servidor público hay que ser militante.
“Se debe a respetar el Estatuto Orgánico. En las instituciones cualquier malatraza (sic) quiere mandarnos a los que hemos luchado y dado el pecho”, añadió. El lunes, el ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, Juan Carlos Huarachi, consideró que se debe realizar una “purga” al interior de los ministerios, debido a que algunos “pititas” aún trabajan como funcionarios.
El 8 de noviembre, Arce cumplirá un año en el poder. En el MAS, el diputado Juanito Angulo destaca el papel de las organizaciones sociales en el Gobierno, pero recuerda que la decisión de cambiar ministros es una potestad del presidente Arce. En abril, los Interculturales pidieron tres carteras ministeriales y las destituciones de Lima y Del Castillo.
FUENTE: PÁGINA SIETE
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